Discográfica:
Napalm Records
Fecha de edición:
7 de junio de 2024
Componentes:
Tom S. Englund – Voz y guitarras
Henrik Danhage – Guitarras y coros
Rikard Zander – Teclados y coros
Johan Niemann – Bajo y coros
Jonas Ekdahl – Batería
Hay mentes prodigiosas capaces de seguir escribiendo grandes canciones y melodías después de 30 años de carrera y un montón de discos a la espalda. Siempre ayuda rodearse de un buen equipo, pero también investigar y hacer cambios de vez en cuando.
Los maestros del Metal Melódico Oscuro, los suecos Evergrey y su líder Tom S. Englund deben saberse la lección muy bien, porque no paran de darnos alegrías a los fans. Este decimocuarto trabajo, “Theories of Emptiness”, es para mí su mejor esfuerzo hasta la fecha y ya había dicho esto mismo con otros de sus últimos lanzamientos. Y sí, tiene cambios.
Tuve la maravillosa oportunidad de entrevistar recientemente a su ya exbatería Jonas Ekdhal y le decía que tras unas primeras escuchas, me parecía que el disco era puro Evergrey: heavy, progresivo, melódico, oscuro, melancólico… pero a la vez me sonaba algo distinto y sobre todo, me sonaba más inspirado y orgánico que nunca. Jonas me daba algunas pistas: el bajista Johan había contribuido en la composición de muchas canciones (algo nuevo en la banda), el teclista Rikard había usado bastante el Hammond y hasta su piano de cola, la banda había contado por primera vez con Adam “Nolly” Getgood (ex Periphery) para la mezcla y la masterización la habían hecho con otro ingeniero de sonido distinto, Thomas “Plec” Johansson (quien ha trabajado para bandas tan distintas como Soilwork o The Night Flight Orchestra). Por supuesto la dupla de Tom y Jonas se había mantenido fundamental en todo el proceso creativo. Todas estas novedades han refrescado el sonido de la banda y el resultado, es inmejorable.
“Theories of Emptiness”
No sé cuántas veces puedo haber escuchado “To Become Someone Else”. Es sencillamente sublime, lo tiene todo: esos riffs potentes, densos, oscuros, que te hacen mover la cabeza; una interpretación vocal emotiva que te agarra el corazón en su intenso estribillo; pero sobre todo, creo que quien más brilla es Rikard, que añade un montón de sonidos y pasajes espectaculares, gustándose durante todo el tema y no regalando para la galería ni un solo segundo, todo tiene sentido. Yo podría pagar una entrada de un concierto solo por oír una buena interpretación de esta canción.
El primer single “Falling from the Sun” sorprende poco, pues es la típica composición potente y rápida, marca de la casa, pero te acaba conquistando con su melódico estribillo. Por cierto, el vídeo es impresionante y es la continuación del último que sacaron de su anterior trabajo, el de “Ominous”. El segundo adelanto “Say”, pasará a la historia por su amargo final, con la despedida de Jonas, aunque antes ya me había conquistado con el Hammond inicial, los solos de guitarra y la potencia de Jonas tras los parches. Su triste final ha hecho que por ahora haya disfrutado más del tema en audio que del vídeo.
Todo el disco está lleno de inspiradísimos estribillos que se te incrustan en la cabeza, es imposible elegir uno. Casi todos tiran por la vena más melódica, aunque el que se lleva la palma para mí, es el de “Ghost of my Hero”. La canción pone la carne de gallina, no sólo por la increíble interpretación vocal de Tom, si no sobre todo por los grandiosos arreglos de cuerda que ha metido el indio Vikram Shankar, el compañero de Tom en su proyecto paralelo Silent Skies.
Me llaman la atención, no porque sea un recurso nuevo, pero sí por el resultado, los coros de “Misfortune” que brillan por encima de un sonido denso, pero épico, de bajo y teclados. Los de “One Heart”, no solo es que sean una chulada, si no que además están participados por algunos afortunados fans de la banda (“One heart, one soul, our hearts united”). Una pasada para disfrutar en directo con todo el público coreando su estribillo. Dónde sí que sorprenden es en “Cold Dreams”, porque creo que por primera vez en su historia meten algunas voces guturales por parte del gran Jonas Renkse (Katatonia) y hasta la hija de Tom, Salina Englund, participa en los coros. El tema en sí es una chulada, un viaje de casi 7 minutos, dónde todos los músicos tienen la oportunidad de gustarse y el sonido sube y baja como en una montaña rusa. Otra composición que en directo debe ser una experiencia única.
La bonita y melancólica “Our Way Through Silence” nos muestra el camino al final del disco, que está protagonizado por un momento muy especial llamado “A Theory of Emptiness”, que más que una canción, parece una reflexión sobre el vacío, la libertad y la felicidad: “In the freedom of emptiness don’t be afraid when nothing is there / When nothing is there / Then you’re free”. La verdad es que todas las letras de este trabajo merecerían un capítulo aparte, pues son siempre oscuras y tristes, como suele ser la propia música. Aunque en algunas de las canciones se atisba algún rayo de luz algo más optimista. Espero que no todas estas historias estén basadas en experiencias personales, porque indicarían que la vida de Tom, no es muy luminosa otra vez.
Conclusión
Tom Englund no quiere que sus Evergrey se duerman en los laureles y ha buscado introducir cambios, desde la portada y las imágenes promocionales, hasta la composición, mezcla y masterización. Pero que nadie se asuste, “Theories of Emptiness” es puro Evergrey. Aunque más inspirado que nunca. Los estribillos son mejores, los solos de guitarra siguen tan intensos como en los últimos discos, el sonido de la base de ritmo y los teclados es más orgánico y dinámico. Y la voz de Tom… ¡es la de siempre!.
¡Deseando que anuncien gira por España!
Texto: Íñigo Metalson
Temas:
1.Falling from the Sun
2.Misfortune
3.To Become Someone Else
4.Say
5.Ghost of my Hero
6.We are the North
7.One Heart
8.The Night Within
9.Cold Dreams
10.Our Way Through Silence
11.A Theory of Emptiness