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Retrocríticas: Helloween – Master Of The Rings

Helloween

Discográfica: 

Castle Communications

 

Fecha de edición:

8 de julio de 1994

 

Componentes:

Andi Deris (Voz)
Michael Weikath (Guitarra)
Roland Grapow (Guitarra)
Markus Grosskopf (Bajo)
Uli Kusch (Batería)

“Master Of The Rings” significó para el grupo alemán, lo que supuso 7 años antes “Keeper Of The Seven Keys Part I” para “Keeper Of The Seven Keys Part II”: el inicio del sonido que más tarde afianzó la siguiente obra magna: “The Time Of the Oath”. Con una salvedad, no pequeña, que esta vez Helloween no se quedarían en una bilogía, sino en una trilogía de oro.

Valga por delante decir, que la saga “Master Of The Rings”, “The Time Of The Oath” y “Better Than Raw” me parece lo mejor que han hecho Helloween en su historia, por mucho que el mundo del Metal me intente convencer que no estaban Kiske, ni Hansen, ni Ingo (D.E.P.). Para mí, la energía, química y composición de estos tres discos está un peldaño por encima de sus obras clásicas de los 80. ¡Ojo!, sin desmerecer en absoluto (no se me entienda mal) sus tres primeros discos, que por supuesto son otras tres obras maestras. Y lo digo con conocimiento de causa, (y con algunos ojos subjetivos), pues Helloween es mi banda preferida desde hace más de 30 años.

Si “The Time Of The Oath” lo considero como el mejor disco que los teutones han grabado nunca, “Master Of The Rings” es el que más hondo caló en mi corazón. Por ello, me adentro a escribir estas palabras con todas las ganas del mundo de debatir, con profundo respeto, cuál es la época dorada de las calabazas.

“Master Of The Rings”

Todos conocemos la historia: Helloween destrozan tímpanos con “Walls Of Jericho” y después nos regalan las joyas de la corona con los “Keepers I y II”, alzándose como los absolutos reyes del género. Más tarde, las aguas se vuelven turbulentas y arrastran a Hansen, dejando el barco sin un capitán claro. “Pink Bubbles Go Ape” abre boquetes y “Chameleon” (a pesar de tener un temazo como “Giants”) acaba por hundir el barco. Kiske salta por la borda y lo que ocurrió con el pobre Ingo aún pesa en el corazón de más de uno. A la deriva, anclados en lo más profundo del océano, los tres tripulantes medio ahogados encontrarían a dos Poseidones que levitarían el barco alemán hasta la isla más paradisíaca. La entrada del cantante de Pink Cream 69 y del ex-grumete de Kai Hansen en Gamma Ray, harían girar la aguja de la brújula, más al Norte de lo que jamás estuvieron. Andi Deris y Uli Kusch dotaron a la banda de la innovación, creatividad y unicidad, que hasta ahora muy pocos grupos han logrado. Porque cuando escuchas “Master Of The Rings” ni se parecía a nada, ni se le ha parecido nada desde entonces. Ahí radica la clave. Es verdad que Uli Kusch no explotaría en la composición hasta “Better Than Raw”. Tampoco le haría falta porque su ingenio queda patente desde el segundo uno en lo que es, para mí, la mejor entrada de batería del género con “Sole Survivor”. Pero lo de Andi Deris fue entrar por la escotilla grande: autor o coautor de la mitad del disco.

Con una voz inimitable (para gracia o desgracia de muchos/as), pero con unas ganas de ponerse a Helloween a su espalda como jamás se ha visto con un miembro no inicial. Las fuerzas que trajeron las nuevas incorporaciones tuvieron contagio en el resto, y harían recordar lo que antaño fueron a Weikath y Grosskopf. Por su parte, Grapow, tuvo que sentirse como el niño con zapatos nuevos que hasta entonces no estrenó. El disco estaría cargado de canciones que encrudecían el sonido de antaño como “Sole Survivor”, “Why?” o “Still We Go”, que le daban otro tono a lo que nos tenían acostumbrados, llevándolos a un nivel que enmarcarlo en el Power Metal casi estaba hasta fuera de lugar. “Where The Rain Grows”, “Perfect Gentleman” o “The Game Is On” seguían teniendo esa marca happy de la calabaza que Weikath se encargó de impartir, haciendo las delicias de muchos/as que amaban “Dr. Stein”, “Future World” o “I Want Out” en años anteriores. No en vano, dos de estas tres fueron los singles. “Mr.Ego”, “Take Me Home” o “In The Middle Of A Heartbeat” ponían la variedad: una por medio tiempo, otra por rockera y otra por dar ese respiro que necesitan los discos, con una de las mejores baladas de su larga carrera, sino la mejor.

Y dejo para el final, lo que para mí es el temazo de la obra, la pincelada perfecta en el cuadro: “Secret Alibi” que expresa la máxima seriedad por amar este infinito arte. El resultado fueron 10 canciones (con una introducción) que echaron por tierra cualquier falta de confianza que el mundo del Metal pudiera tener hacia los germanos.

Conclusión

El retorno Helloween con “Master Of The Rings” fue como el retorno de Aragorn en la Tierra Media: Nadie sabía donde estaba, nadie lo esperaba, nadie apostaba por un nuevo reinado de los hombres; pero una vez recuperó las ganas con la nueva Compañía…. ¡menuda trilogía se nos vino encima!

Texto: Samuel Arnaiz

Temas:

1. Irritation
2. Sole Survivor
3. Where the Rain Grows
4. Why?
5. Mr. Ego (Take Me Down)
6. Perfect Gentleman
7. The Game Is On
8. Secret Alibi
9. Take Me Home
10. In the Middle of a Heartbeat
11. Still We Go

By Redacción Metal Hammer

Metal Hammer és una marca legendaria en toda Europa en cuanto a la difusión de la escena del hard rock y heavy metal. El primer número de la revista se editó en diciembre de 1987.

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