Banda: Kingdom of Madness
Lugar: Sala Upload – Barcelona – 11 de abril de 2024
Promotor: RM Concert Promotions
Fotos: Quico Gras
Hay conciertos a los que vas sin saber mucho lo que te depara la noche. A los que asistes, como es el caso, por tu confianza en el buen gusto y los años de experiencia del promotor, R.M. Concerts Production. Es en estas ocasiones en las que puedes encontrarte con tesoros que, quizás por imprevistos, brillan por encima de lo normal. Y es también en estos conciertos, al salir de la sala y constatar con compañerxs y conocidxs que hemos visto algo especial, que la responsabilidad de escribir alguna cosa que esté a la altura pesa más de lo normal.
Esto nos sucedió el jueves 11 de abril en la Sala Upload de Barcelona, mientras de vecinos teníamos a trabajadorxs de McDonald’s llegados de todo el mundo celebrando su cena de fin de convención en la plaza central del Poble Español, quizás con una noche más previsible que la nuestra.
El cartel estaba formado por tres artistas: Jaime Kyle, Gabrielle de Val y Kingdom of Madness, en una gira que tenía parada en Barcelona, Vitoria y Madrid. Y, en una entrada floja (palabra del promotor), explicaremos que la noche empezó un poco accidentada, pero acabó brillando por encima de lo habitual.
Jaime Kyle no puede acabar su actuación
La norteamericana Jaime Kyle era la encargada de abrir la noche. Venía ella sola, con su último trabajo debajo del brazo, Wild One, editado el 2022. Aunque para su actuación estuvo acompañada por la banda de la artista que la sucedía, Gabriele de Val.
Tras utilizar el traductor de su móvil para saludarnos con un poco espontáneo “España os llevo en el corazón”, tenía previsto presentarnos un setlist de tan solo seis canciones que finalmente se quedó únicamente en tres: “Back from Hollywood” que dio nombre el 2019 a su penúltimo trabajo de estudio, el segundo track de su trabajo más actual “Driving with the Brakes On” y su reciente sencillo con Bernie Marsden, “Invisible. Temas que sonaron bien y empezaron a calentar el ambiente, pero en los que la voz de Kyle ya nos anticipaba que había algún contratiempo.
Al preguntarle a uno de sus músicos acompañantes por lo sucedido, nos explicó que Kyle ya se encontraba indispuesta antes de empezar y que igualmente intentó tirar adelante su actuación. En el momento que escribimos esta crónica vemos que las dificultades se han alargado, afectando a los conciertos posteriores. Deseamos una pronta recuperación de la artista y esperamos poder volver a verla para acabar de disfrutar de su actual momento musical.
Una Gabriele de Val comunicativa no consigue levantar la noche
Gabrielle de Val subió al escenario antes de la hora prevista a causa del contratiempo de su predecesora. Esta era una de las paradas previstas en la gira de presentación de su último trabajo en solitario “Kiss in a Dragon Night” (2023) y venía acompañada de la banda de gira, que ya habíamos conocido en la frustrada actuación anterior: Gustavo Martín a la guitarra, Jose L. Gallera Partal al bajo, Javier “Cozy” a la batería y Gustavo Di Nobile al teclado. Excelentes músicos de directo los cuatro.
Mostrándose en todo momento comunicativa y contenta de poder presentarnos en directo su nuevo trabajo, Gabrielle de Val expuso un setlist formado enteramente por canciones del nuevo EP, con tan solo una excepción. Canciones con una carga de teclado relevante, con letras en inglés y que tal vez nos han sonado mejor en el trabajo de estudio, donde muchas de ellas se presentan cantadas a dúo con colaboraciones relevantes.
En la Sala Upload empezaron con dos temas de su trabajo actual: “Natural High” y “Fuel to the Fire”, para continuar con esta excepción de la noche: “When he’s Gone”, que forma parte del trabajo conjunto de varios artistas “Circle of Artists” (2022). Continuaron con más material nuevo: “Hold On” y “Kiss in a Dragon Night”, hasta llegar a “Think Like a Man”, tema que únicamente aparece en la versión japonesa del nuevo EP y que nos fue presentado con la explicación de “a veces me gusta pensar como un hombre”.
Sin conseguir llegar a mostrar una llama demasiado alta, siguieron con más temas del nuevo trabajo: “Pay for the Lonely Nights”, “Candle in the Window”, “Take on the World”, hasta desembarcar en el conocidísimo “Moonlight Shadow” de Mike Olfield, cover también incluido en el nuevo EP. Finalizaron con el también nuevo “Le’ts Get Something Started”, que posiblemente fue el tema que más brilló y con el que cerraron la noche en el punto más alto.
Al finalizar el concierto, tal vez consciente de que no había conseguido dejar una huella demasiado profunda, Gabrielle de Val se mezcló con el público y se mostró amable y comunicativa con todo el mundo que la interpeló. Por nuestra parte, pudimos saludarla y hacernos una bonita foto con ella.
Añadimos a la deuda acumulada con el primer pase el poder pasar nuevamente por un concierto de Gabrielle de Val, para verla brillar ante una audiencia más voluminosa y entregada, con la intensidad que tiene su último trabajo y con la capacidad de quemarnos en directo, que segura que la tiene.
Kingdom of Madness nos demuestran que son una banda con personalidad propia y que se alejan de ser un simple homenaje a Magnum.
Para que podáis continuar leyendo la presente crónica con altas expectativas, explicaremos que la noche acabó por todo lo alto y que fue gracias a la última banda en subir al escenario.
Kingdom of Madness es un proyecto reciente impulsado por Mark Stanway, histórico teclista de la banda británica Magnum, con el siempre bienvenido propósito de homenajear a esa gloriosa banda de Birmingham. El nombre del proyecto corresponde directamente al nombre del primer trabajo de estudio de Magnum, editado hace la friolera de cuarenta seis años.
Sin embargo, nada más subir al escenario ya empezamos a intuir que el proyecto era mucho más que un simple homenaje y que tenía personalidad propia. Quizás gran parte de esta impresión inicial fue causada por la presencia de los dos cantantes. Mo Birch, la voz femenina de la banda, ataviada con pantalones de leopardo y gafas de sol, pandereta en mano, de voz portentosa y fachada relevante. Con ella nos atreveríamos a conquista cualquier escenario. Y con Chris Dando a la voz principal, en una tesitura más cercana a las voces agudas de la banda madre, pero mostrando una camiseta de TesseracT y botas modernas de suela alta que lo alejaban de cualquier estereotipo ochentero.
Mark Stanway se mostró en todo momento radiante tras los teclados, con pose de tenerlo todo controlado, manteniendo apoyada su campera en el chivato lateral. Demostró que es un gran músico y que constituye la base musical de todos los temas. Lo acompañaron los también ex miembros de Magnum: Richard Bailey, que se mostró muy expresivo y demostró su capacidad multi instrumentista tocando teclados, guitarras y flauta travesera. Y Mickey Barker a la batería, también mostrando su alegría y constatando que todavía tiene es un músico excelente.
Acompañando a los tres músicos con trayectoria en historia de Magnum, en la parte de las cuerdas vimos a: Brian Badhams al bajo, de técnica clásica y sonido muy apreciable en todo momento. Y Alan Bell a la guitarra, que desarrolló una actuación memorable alternando riffs con solos, con un feeling que nos hizo volar, tal como volaban los pájaros que aparecían en los mástiles de todas las guitarras que tocó.
El resultado final de la unión de estos siete músicos fue un excelente repaso de catorce de las primeras composiciones de Magnum. Canciones que, en manos de Kingdom of Madness, sonaron realmente vivas y se nos presentaron bajo un enfoque novedoso, con una personalidad propia muy relevante y que nos hizo olvidar todos los fantasmas de la noche. Una banda con personalidad relevante y con un directo poderosísimo, lleno de argumentos musicales que expusieron a lo largo de toda su actuación y que nos acabaron, ahora sí, sumergiendo en una noche memorable.
Tras escribir esta crónica, nuestra conclusión es que nuestras palabras nunca estarán a la altura de las actuaciones más especiales, como esta que vimos protagonizada por Kingdom of Madness el 11 de abril en la Sala Upload. Pero esa es precisamente la magia del rock en directo. Es imposible glosar lo vivido con todos sus matices y emociones. Y, si conseguimos acercarnos, siempre estaremos explicándolo desde nuestra experiencia. La única manera de tener vuestra propia versión detalle de todo lo ocurrido es ser un espectador más. ¡Nos vemos en las salas! No dejéis de saludarnos.
SET-LIST:
- Changes
- Back to Earth
- Just Like an Arrow
- Wild Swan
- The Prize
- Need a Lot of Love
- Les morts dansant
- Midnight (You Won’t Be Sleeping)
- Rockin’ Chair
- Only in America
- On a Storyteller’s Night
- Kingdom of Madness
- The Lights Burned Out
- Sacred Hour