Discográfica:
Napalm Records
Fecha de edición:
29 de septiembre de 2023
Componentes:
Tim “Ripper” Owens – Voz
K. K. Downing – Guitarra
A.J. Mills – Guitarra
Tony Newton – Bajo
Sean Elg – Batería
La vorágine de lanzamientos en la que estamos immersos hace que las novedades se quemen a la velocidad de la luz. Cualquier disco que sale al mercado a la semana ya ha sido engulido por los siguientes. Eso siempre merma la atención que les puedes prestar y, en el caso que nos ocupa, parece imposible que este disco tenga tan solo poco más de un año.
Y lo cierto es que el señor K. K. Downing parece que tiene bien claro que el estandarte del heavy metal más clásico también le pertenece un poco. Sin duda el personaje ha firmado algunos temas legendarios y con este proyecto quiere dejarlo claro a sus ex-compañeros de Judas Priest. Ya todos estáis al tanto que para la aventura ante la que estamos pensó que lo mejor sería que el puesto de vocalista recayera en Tim «Ripper» Owens… hombre, un poco de morbo sí que hay.
No nos llevemos a engaño, esta es la banda del señor Downing. Él lleva las riendas, compone y es la mente tras el grupo. El resto lo reconocen y acatan. Sea como sea todo esto nos lleva a tener dos bandas activas en la escena con toda la esencia del heavy metal clásico y el catálogo de Judas Priest detrás, que no es poco, y que parece van a seguir ofreciendo material nuevo como este segundo trabajo de KK’s Priest.
K. K. Downing sabe cuál han sido las mejores épocas de su banda de siempre y con el empuje de todavía unas cuerdas vocales del sr. Owens con toda la capacidad está queriendo explotar ese legado además de poder recuperar la era del vocalista americano en Priest, totalmente abandonada por los británicos. «The Sinner Rides Again» profundiza en lo que ya mostró su primer trabajo de lo que es buena muestra el tema que abre «Sons of Sentinel», pieza hímnica de heavy metal clásico con un riff hiriente y la afilada voz de «Ripper». Puede sorprender después del solo la parte melódica con un pequeño colchón de lo que parece teclados. El palm-mute contra las cuerdas reina en «Strike of the Viper» que conjuntamente con el doble bombo busca huir de la velocidad pero no de la contundencia. Estribillo facilón, solo afilado y «Ripper»… en su línea… gritando.
Por si había alguna duda de donde venimos «Reap the Whirlwind» tiene un halo a Priest evidente. Traspasa esa mezcla de rock ‘n’ roll y heavy metal tan característica en alguna época de los británicos. Solo trillado hasta la saciedad y «Ripper» abusando como de costumbre de su voz, agudos imposibles e impecables pero ya vistos. «One More Shot at Glory» pasa por ser una de las mejores piezas. Enigmática y oscura de cadencia lenta muy a lo Manowar. Uno de los temas más diversos que hacia los dos minutos incluso me ha recordado a ciertos pasajes de black metal que desemboca en un solo de lo más clásico. Precisamente la misma dinámica de la pieza es ideal para las intervenciones de los solistas aunque ese fade out al final no le hace justicia. Hay mejores maneras de acabar.
Si algo se me antoja prescindible es «Hymn 66», esquemas ya vistos y una ambientación fantasmagórica que no encaja. Suerte que es momentáneo ya que «The Sinner Rides Again» vuelve al buen cauce en lo que parece una balada al inicio y acaba convirtiéndose en un fiero tema con toques a Pantera y Metallica. Ripper muestra mucha más versatilidad dejando claro que es más que agudos constantes. De lo mejor del disco. «Keeper of the Graves» contiene una intro solemne que desemboca en un tema de heavy metal clásico que no decepciona pero tampoco apasiona.
El dúo final de temas lo tenemos con «Pledge Your Souls» que poco aporta al conjunto final, sencillamente un tema más, para acabar con «Wash Away Your Sins» que se nos revela más épica. Acústica inicial con «Ripper» acaparando protagonismo llegando a rugido casi gutural da paso a un tema al uso de metal clásico. A destacar la parte instrumental central pero sin acabar de resolver el final con esos dichosos fade outs.
En conclusión un disco que hará disfrutar a los fans de los Priest de la era Painkiller (1990) con unas voces acordes a ello salvando las distancias con tamaña obra. «Ripper» demuestra que su nivel vocal sigue en excelente estado y K. K. Downing, sin brillar, sabe como hacer buenos temas contando con una banda más que solvente. Lo bueno es que en directo recuperan cosas que de otra manera sería imposible. Perfectamente disfrutables.
Temas:
1. Sons of the Sentinel (4:12)
2. Strike of the Viper (2:25)
3. Reap the Whirlwind (3:35)
4. One More Shot at Glory (4:28)
5. Hymn 66 (4:36)
6. The Sinner Rides Again (4:41)
7. Keeper of the Graves (5:41)
8. Pledge Your Souls (4:28)
9. Wash Away Your Sins (6:29)