La segunda edición del Rock Imperium de Cartagena se asienta gracias a una edición de lujo. El Rock Imperium de Cartagena se ha celebrado este fin de semana pasado (del 23 al 25 de Junio, en un recinto que estrenaba escenario, tamaño y mejoras.
Texto y fotografía: Yagros Stilav
Según las primeras cifras oficiales, más de 20.000 personas de media cada día, completando los 60.000 asistentes, cifra que coloca al festival entre los puntales de nuestro país. A continuación, os resumimos tres jornadas que han ido de menos a más y han dejado un muy buen sabor de boca.
PRIMER DÍA DEL FESTIVAL: Aclimatarse con Calabazas como dieta.
El día arrancaba temprano con un cartel en el que el Power Metal era el protagonista. El calor era el invitado no deseado, pero teniendo en cuenta las fechas y el emplazamiento, tampoco fue nada del otro mundo. En cuanto ponías un pie en el recinto, te dabas cuenta que éste Festival apuesta fuerte por asentarse y crecer, algo que deseamos más de uno.
El recinto estaba situado en la cuesta de El Batel, un parque con zonas de sombra en los aseos y puestos de bebida y una muralla que también facilitaba la sombra. Dos escenarios imponentes se erigían como los principales, mientras que el tercer escenario se situaba en la parte alta del recinto, a diferencia del año pasado. En la parte del parque, con árboles y césped en perfecto estado, estaban situadas dos barras de bebida laterales, una en mitad del recinto, la zona de merchandising, dos zonas de aseos, zona de firmas y escenarios principales.
A la zona de arriba se accedía por unas escaleras metálicas instaladas para la ocasión. En la zona de arriba se encontraba la zona VIP, el tercer escenario, algunos puestos de ropa y complementos y la zona de comida. A esta zona, una repensada le vendría bien, ya que se escucharon algunas quejas por el hecho de no haber zonas de comida en la parte baja.
Tras un vistazo rápido a las camisetas, las cuales este año eran muy variadas al precio de 25 euros, era la hora de arrancar la jornada. Los encargados de dar el pistoletazo de salida eran los valencianos JOLLY JOKER, quienes ya no son unos novatos en lo que se refiere a demostrar su valía. Buen inicio de festival donde la asistencia era bastante floja debido, posiblemente, al calor que hacía en ese momento.

Con el cuerpo listo para las actuaciones que se presentaban ante un público expectante, era el turno de LEO JIMÉNEZ, un asiduo en los festivales veraniegos y por algo es. Su actuación fue firme y muy enérgica, donde demostró, una vez más, que es un artista hecho de otra pasta. Hubo tiempo para sorpresas, como la ya clásica subida al escenario por parte del vocalista de MINOS, Mr. Korpa. Duelo de guturales donde LEO volvió a demostrar una técnica que lleva años perfeccionando (y enseñando). Como era de esperar, la actuación de «La Bestia» no dejó a nadie indiferente, convenciendo a propios y extraños con temas conocidos como «Es Por Ti» . Su actuación fue breve, pero en apenas una hora puso las bases de una jornada que no hacía más que mejorar. Con la fuerza de su actuación, consiguió desperezar a más de un adormilado por el calor. No sería la primera aparición del cantante en el festival, pero eso lo contamos más adelante.

EVERGREY venían precedidos por la desgracia de haberse quedado sin equipo por pérdida de equipaje, gracias a una Lufthansa de la que se acordaron durante su actuación. Con equipo prestado por otros músicos, los suecos ofrecieron su característico estilo progresivo frente a una cada vez más numerosa marea de público. Para cuando terminaron de interpretar «King of Errors», la banda se había metido en el bolsillo a un buen puñado de asistentes. La calidad de su formación y la participación del público fueron los ingredientes perfectos para triunfar en unas condiciones nada fáciles, por horario, calor y pérdida de equipaje.
Había muchas ganas alrededor de la actuación de STEVE ‘N’ SEAGULLS, un grupo de Finlandia que hace versiones de Heavy y Rock al más puro estilo de Arkansas. Dicho así, parecía la típica actuación de fiesta y poco más, pero nada más lejos de la realidad. Pedazo de músicos subieron al escenario. No hay que olvidar que estábamos rozando los 33 grados de temperatura, un clima muy poco finés. Eso no supuso ningún problema para que, banjo, contrabajo, mandolina, acordeón, batería y mucho humor, el grupo se comiera el escenario.

A una velocidad endiablada y con mucho respeto hacia las versiones, los simpáticos integrantes de la sorpresa del día, se dedicaron a deleitar con buen rollo e himnos reconvertidos a una audiencia entregada. Desde «The Trooper», hasta «Master of Puppets», pasando por «Over the Hills and Far Away», no dejaron descansar al respetable. Como no podía ser de otra forma, se despidieron con «Thunderstruck» de ACDC ante la sonora ovación de la gente, que disfrutó de lo lindo. Sin duda, del top 5 de actuaciones del festival.
SARATOGA eran los siguientes en subir al escenario, con la difícil papeleta de mantener el nivel tras lo vivido con la anterior banda, arriba citada. Tete Novoa comandó por aguas seguras la nave de una banda que, sin que nadie pueda negarlo, es ya un clásico del Metal nacional. Con 30 años de carrera a la espalda, no iban a dejar pasar la ocasión de ofrecer alguna sorpresa a los asistentes. Y así fue. Volviendo al pasado para honrarlo, subió al escenario LEO JIMÉNEZ para interpretar a dos voces «Vientos de Guerra», convirtiendo la canción en un duelo de registros vocales y notas agudas. Sin duda, uno de los momentos del día.

Llegados a este punto de la primera jornada, era el momento de hacer balance de energías y sopesar una visita a la zona alta. Mientras que algunos contaban con hasta cuatro miembros de staff para cubrir el festival, por nuestra parte sólo teníamos a un guerrero en el campo de batalla.
VENUS 5 iban a tocar en el escenario 3, y pudo el sentido común y la opinión propia antes que la curiosidad. El grupo se ha hecho famoso por motivos que quien escribe no comparte, y además, no iba a perderme a los dioses de la fantasía medieval metalera por ver un espectáculo que poco tiene que ver con los gustos musicales de alguien que aprecia el buen Heavy Metal.
Por tanto, era hora de disfrutar de BLIND GUARDIAN. Si hasta ellos habíamos oído pocas quejas del imponente sol, ya se encargaron ellos de poner de manifiesto que el calor es otro invitado más en los festivales de verano. Eso no hizo que los teutones se guardaran nada, y fue de agradecer. Anécdota que viene al caso para contar lo vivido durante su concierto.

El fin de semana anterior a este gran ROCK IMPERIUM FESTIVAL, se celebraron las presentaciones de Magic de la edición de El Señor de los Anillos. Durante la firma de la banda, METALHAMMER le regaló al batería una carta temática, la cual lucieron durante su concierto, señalándole mientras interpretaban «Lord of the Rings». Bonito recuerdo para uno que por aquí les sigue desde hace décadas.
Cerrado el kit kat, la noche se acercaba y tocaban los primeros cabeza de cartel de esta segunda edición. HELLOWEEN, o lo que es lo mismo, PUMPKINS UNITED, eran los encargados de poner la penúltima piedra del día. Lo cierto es que arrancaron muy bien, pero no ofrecieron nada nuevo que no llevan ofreciendo desde la reunión. No hay que olvidar que en esta ocasión se presentaban con tres voces y la formación al completo.
Michael Kiske y el guitarrista y vocalista Kai Hansen junto con el cantante actual Andi Deris, los guitarristas Michael Weikath y Sascha Gerstner, el bajista Markus Grosskopf y el baterista Daniel Löble. Una formación que quita el hipo, pero que luego en directo deja una sensación extraña. Las guitarras sonaban una encima de otra y deslucían el buen hacer de los vocalistas, que se sincronizaban a tres voces de manera casi marcial. Se pudo ver la buena sintonía entre ellos en clásicos como «Metal Invaders», «Best Time» o «How Many Tears».

Por mucho que a algunos y algunas les parezca soporífera, la enorme «Keeper of the Seven Keys» en directo, es un lujo. La interpretación de este gran himno del Power Metal en vivo es un manjar que pocas veces se puede uno echar a la boca. El público no sólo coreó los estribillos pegadizos, sino que elevó la actuación del grupo a la máxima expresión. Si hay una canción que les define, es esta. El final de la actuación, me lo tuve que saltar, porqué TYGERS OF PAN TANG habían reunido a un buen grupo de fieles para deleitarse con el Rock más clásico de un grupo que marcó una época.
STRATOVARIUS cerraban en los escenarios principales ante una audiencia que poco a poco iba abandonando el recinto. Una jornada agotadora, donde muchos llevaban encima horas de viaje, a las que habían sumado sol, calor y muy buena música. Era hora del descanso, ya que se avecinaban dos jornadas de infarto.
SEGUNDO DÍA: LO CLÁSICO NUNCA MUERE
La segunda jornada del ROCK IMPERIUM FESTIVAL se presentaba como una cita con lo clásico, y por mucho que tenga ganas de contaros la gran despedida de KISS, lo cierto es que el segundo día fue mejor incluso que el primero. La banda comandada por el simpático Alessandro Del Vecchio tenían la difícil misión de abrir una cita donde los grandes esperados eran DEEP PURPLE. Con una actuación convincente, insuflaron energía a las primeras filas, que desde primera hora del día estaban repletas de gente que aguardaba a los cabezas de cartel. Con una mejor afluencia a primera hora que la primera jornada, los grupos pudieron disfrutar de más público, y quizás, esto fuera parte del éxito de la jornada. Volviendo a los conciertos, tras el buen hacer de THE BIG DEAL, saltaron a escena los que, para mí, protagonizaron otra actuación de Top 5. Tenemos a STEVE’N’ SEAGULLS ya en el ranking, y sumamos a CHEZ KANE.

Mientras para algunos (con poco sentido del nivel musical del AOR más clásico), su actuación fue espesa, para la gran mayoría del público, fue uno de los conciertos más enérgicos del día. La británica comandó a una banda que salieron a por todas y no se dejaron nada en el tintero. Pude comprobar que entre el público (y algún fotógrafo, va por ti Fran) había fans acérrimos del grupo. Se pudieron oír vítores y coros durante toda su actuación. Había que estar mirando para otro lado para no darse cuenta que estábamos ante una de las actuaciones del festival. Con una voz casi perfecta e himnos como «Rocket on the Radio», el carisma y buen rollo de la cantante se contagió rápidamente entre el público. Un show corto, intenso y de calidad fue lo que ofrecieron y dejaron con ganas de más. Hay que recordar que en Octubre nos visitan en 4 fechas que no hay que perderse, al menos una.
Tras ellos, METALITE se encargaban de dar continuidad a una jornada donde las front woman destacaron y subieron el nivel del festival a cuotas que mejoraba lo vivido hasta entonces. Si bien la banda sueca no tuvo su mejor actuación, dejaron patente que han cogido la ola de AMARANTHE y se han sumado a incluir sonidos electrónicos y de house dance en sus canciones. El problema de llevar pre grabados en directo es que, o sincronizas perfecto, o suena a destiempo. Fue lo que les ocurrió, que los samples iban en un tempo y la vocalista en otro, por lo que se le vio bastante incómoda durante la actuación. Por suerte, estaba bien escudada por una banda que transmite cercanía y que terminaron por enderezar su show.

Volvemos al top 5, con los terceros en discordia, THE NIGHT FLIGHT ORCHESTRA. Viendo a las coristas, por fin he entendido el nombre del grupo. Pero vamos por partes. El vocalista se presentó sobre el escenario con capa y trajeado, de punta en blanco como los guitarristas. Y las coristas, de azafatas de vuelo. Vuelo nocturno. Metidos completamente en el papel, hasta sirvieron champagne durante su actuación. Así que vamos a contar su concierto, metidos en el papel.
La aerolínea TNFO despegó a última hora de la tarde con el sol de cara y viento de cola favorable, lo que provocó no pocas turbulencias entre los pasajeros. Al son de los motores a toda máquina, el vuelo de una de las mejores bandas que ha pasado por el festival, levantaron a un público que ya había sido calentado en la sala de espera. Las puertas de embarque se abarrotaron para disfrutar de temas setenteros con un toque moderno que dan como resultado la mezcla perfecta. Quien no conozca a esta banda, que les eche una escucha que vale la pena.
Tras el buen sabor de boca dejado por TNFO, la enésima banda de Suecia se presentaba en el escenario principal. H.E.A.T salieron como un torbellino para dejar patente que Swedish Hard Rock no tiene nada que envidiar a ningún estilo musical. El nuevo cantante tenía un reto ante sí, y era superar a su antecesor. Y vaya que sí lo hizo.
Kenny sacó de su mágica chistera todo el poder vocal y se lució, llevando en volandas a una audiencia que desde el minuto 1 se vino arriba. Temas rápidos y llenos de energía, que hicieron que la sensación enérgica dejada por los grupos predecesores se mantuviera y no desfalleciera. «Force Majeure» es su más reciente álbum, y había ganas de ver cómo funcionaban sus nuevos temas en directo. Funcionaron de maravilla, sobre todo «Nationwide», que más de una voz siguió a coro desde las primeras filas. Son una banda muy querida en nuestro país, y eso se notó en un público cada vez más numeroso según avanzaba el día.

Es hora de hablar de EUROPE, padrinos del festival desde que el año pasado salvaran la jornada alargando su show ante la espantada de WHITESNAKE. Se nota que dejaron huella, y una vez más, la audiencia estaba entregada. No había más que ver a la alcaldesa de la ciudad, a quien se le vio disfrutar de lo lindo desde el lateral del escenario. Su concierto fue uno más de los que nos tienen acostumbrados. Oficiosos a la vez que próximos, todos y cada uno de los miembros de la banda no dejaron de interactuar con el público. No faltaron sus clásicos atemporales como «Carrie» o «Cherokee», pero sin duda, el que para muchos es un himno de todos los metalheads, «The Final Countdown» fue la guinda que toda la audiencia esperaba. Temblaron los cimientos del recinto y el estribillo se escuchó hasta Murcia. Dicen los pescadores de la zona, que hasta las sardinas asomaron sus cabezas ante el estruendo de una canción, que le pese a quien le pese, es historia de la música.

Con los pelos de punta y las emociones aún a flor de piel, DEEP PURPLE salieron a escena con el recinto ya abarrotado. Son los abuelos del Metal y el Rock duro, son los creadores de un estilo, los pioneros de los sonidos más duros del Rock. A ellos les deben todas las bandas el insuflar velocidad a un estilo que languidecía a finales de los años 60. Ellos, junto con LED ZEPPELIN, son quienes pusieron las bases de la música que amamos.

Sólo por eso, verlos aunque sea una vez en tu vida es un privilegio. No hay que olvidar que no todos los miembros del grupo están en activo. 1968. Tener presente la fecha de fundación del grupo le da más valor aún si cabe a poder tener el privilegio de verlos en directo. Casi 60 años de carrera que se dice pronto. Octogenarios al mando de canciones como «Highway Star», «Smoke on the Water». «Into the Fire» y un largo etcétera tiene un gran valor. Verlos en directo fue para muchos una oda a la música y se honró en Rock and Roll y todas sus vertientes. Sólo por eso, ninguna pega a su actuación.
¿Quienes cerraban en los escenarios principales? SOEN. Los noruegos tendrían que haber tocado más temprano, y si bien es cierto que los grupos de progresivo eran pocos en el cartel, la estampida de salida de público clamaba un susurro que se oye en el agua. Hay un sonido que los grillos no pueden silenciar y que se oye en cada eco de grupos progresivos que vemos en festivales. BE PROG, MY FRIEND. Se oye en los pequeños círculos y en los grandes festivales como éste. Queremos que vuelva el BE PROG, y el susurro se convertirá en un reclamo. Por cierto, SOEN maravillosos en directo, no es novedad. Entre la calidad musical, la categoría de sus músicos y una voz que despierta emociones, es más que suficiente para desear verlos una y otra vez.
TERCER DÍA DE FESTIVAL, KISS, KISS Y KISS.
Si te preguntan quien tocó el día 25 de Junio en Cartagena, muchos y muchas contestarán que KISS, en su gira THE END OF THE ROAD. Pero hubo mucho más en esta tercera y última jornada del ROCK IMPERIUM FESTIVAL, en su segunda edición que augura un buen futuro para el festival. Por todo el recinto se podían ver rostros pintados y sobre todo, muchas familias. El motivo era el gran cabeza de cartel de esta edición, pero como teloneros, era un día de gran calidad. Como hemos comentado al principio de esta crónica, el festival fue de menos a más, y la tercera jornada fue la mejor por varios motivos.
El primer gran motivo fueron DEATH AND LEGACY, a quienes fuimos a ver a las alturas tras un breve vistazo a SISKA y FROZEN CROWN. La jornada había empezado con una de las peores noticias posibles, ya que NESTOR se cayó del cartel por enfermedad de su cantante. Los sustitutos fueron los locales 91 SUITE. Pero volviendo a DEATH AND LEGACY, un poco de tralla no venía mal al cuerpo para aguantar la larga jornada de hype que nos esperaba.

Primera vez que podía ver en directo a una banda a la que tenía muchas ganas después de escuchar sus composiciones. Alargada es la sombra que ha dejado ARCH ENEMY en el mundo del gutural, y esta banda nacional lo cierto es que tiene en sus filas a muy buenos músicos y a una vocalista que si sigue así, ojito. Heredera directa del estilo de ÁNGELA GOSSOW, dejó patente ante un nutrido grupo de asistentes, que no estaban de paseo. Entretenido concierto de un grupo que desde YA tienen un seguidor más.
Breve refrigerio (que bien sienta el veneno que es la Coca Cola tras años sin probarla), era la hora de volver a la zona de los escenarios principales para ver a la enésima formación en la que RONNIE ROMERO (DIO renacido) se iba a lucir. ELEGANT WEAPONS traían bajo su brazo su primer y único disco hasta la fecha, «Horns for a Halo». Heavy Metal clásico con super grupo, no puede faltar en un festival. Al gran vocalista le acompañaban Richie Faulkner, Scott Travis, Rex Brown, Christopher Williams y Davey Rimmer. Eso son palabras mayores. Si encima sumas que tocaron el disco entero y encima «War Pigs» de BLACK SABBATH, pues imagina el nivel de su actuación. Enorme concierto el que presenciamos y al que dieron continuidad otro super grupo.

LORDI son mucho más que los ganadores de EUROVISIÓN. LORDI son un grupo de los pies a la cabeza, y aún con el calor sofocante (35 grados y subiendo) que hacían a la hora de su actuación, ellos y ella (la teclista, de la que hablaremos aparte), ni cortos ni perezosos, salieron a escena ataviados con sus mejores galas. Lease con sus trajes de monstruos de los pies a la cabeza. ¿Que deberían haber tocado más tarde y mucho más?
Eso es otro debate, pero injustamente tocaron muy pronto. Demasiado corto fue su concierto, donde demostraron que no han perdido el nivel, ni mucho menos. Caso aparte la teclista, metida completamente en su papel de muñeca diabólica. Mientras miraba al público, movía el cuello de manera inquietante y fijaba la mirada deseando extraerte las entrañas con los dientes. Con casi la totalidad de su escenografía, dejaron al público con ganas de mucho mucho más. Una pena, esperamos regresen el año que viene con más tiempo.

En el mundo de la música hay grandes nombres de baterías, y uno de ellos es MIKE PORTNOY. Acompañado del guitarrista y vocalista Ricchie Kotzen y del bajista Billy Sheehan (MR. BIG), el trío se dedicó a premiar a un público expectante con una clase de virtuosismo musical. Aunque un poco más densa que la anterior actuación, lo cierto es que THE WINERY DOGS son perros viejos (bien traídos) en lo que se refiere a directos. Mantuvieron todo el concierto un nivel muy alto y dejaron patente que no todo está inventado en el mundo del rock más progresivo.
Listo. Se acabó la crónica.
Que no. Que KISS tocaron en el ROCK IMPERIUM. Tocaron el cielo. La gira tiene un título que no vamos a repetir para no derramar lágrimas. KISS son el grupo con el que muchos nos iniciamos en todo esto de escuchar música mal llamada satánica. Con 16 años, mis colegas de instituto, con la complicidad de nuestro profesor de Historia, Cedio, nos escapamos a un concierto de la gira de PSYCHO CIRCUS. El profesor nos firmó las autorización a riesgo de todo, y supuestamente estábamos en unas jornadas de museo. Ese día entramos al estadio del Gremio de Porto Alegre (en Brasil), cuatro chavales, pintados cada uno de uno de sus miembros. Nos entregaron unas gafas de 3D y vivimos la noche más fantástica de nuestras vidas hasta ese momento. A día de hoy, cuando oigo los primeros acordes de «Detroit Rock City», se me llenan los ojos de lágrimas de emoción. Eso es KISS. Y eso vivieron generaciones en Cartagena, tod@s junt@s a una sóla voz.
Desde niños de 4 años a gente jubilada, corearon todas las canciones de una banda que aunque se retira, algo tiene guardado para el futuro. Seguro. Es difícil citar una sóla canción que un rockero no haya oído al menos una vez en su vida, y siendo la despedida, no iban a dejar a medias nada. Tuvimos todo en su concierto, la tirolina, los petardos, los fuegos artificiales, el fuego, Gene Simmons escupiendo fuego y sangre. Disfrutamos de «Deuce», «Say Yeah», «Cold Gin», «Lick It Up». Sólo de escribirlo lo revivo.
La escenografía era la esperada, y la histeria se disparó desde que descendieron cual ángeles del infierno entre llamaradas y gritos de euforia. Riffs reconocibles, una voz en la que PAUL STANLEY estuvo a un gran nivel. La dureza y simpatía de GENE SIMMONS y el sueño hecho persona de TOMMY THAYER no faltaron a la cita. ¿Me olvido de alguien? Si.
Hablemos de el cuarto miembro, el batería, el que más ha cambiado. En la voz de «Beth» vivimos a todos ellos, desde Eric a Eric pasando por Peter. Kiss demostró que es legado, que aunque edulcorar las voces sea el recurso de los últimos años, son ellos.
Cuando tocaron las últimas estrofas de «Rock and Roll All Night», sabíamos que era un adiós. Siendo americanos, en nuestras fantasías más profundas hay un reality para escoger a los nuevos miembros, que girarán con pequeñas intervenciones de los miembros originales, con apariciones en mitad de los conciertos. Soñar es gratis.
Por cierto, tocaron SKID ROW tras ellos, dando un grandísimo concierto. Pero la crónica finaliza con KISS. Por ellos y gracias a ellos, siempre metalhead.

En resumen, el ROCK IMPERIUM no sólo en resultado musical fue un éxito. Más de 6 millones de euros en beneficios a la ciudad, oferta hotelera con el lleno casi absoluto, 60.000 asistentes aproximadamente en los tres días, más de 800 puestos de trabajo, 400 sólo para el montaje. Son cifras para tener muy en cuenta en este festival, en el que la promotora y la unión con el ayuntamiento ha mostrado una vez más que el buen trabajo tiene resultado.
Hasta aquí ha sido la crónica de: La segunda edición del Rock Imperium de Cartagena se asienta gracias a una edición de lujo. Próximamente os seguiremos informando en la sección de crónicas y en la revista física.