Discográfica:
InsideOut Music / Sony Music
Fecha de edición:
30 de Agosto de 2024
Componentes:
Einar Solberg – Voz y teclados
Tor Oddmund Suhrke – Guitarra
Robin Ognedal – Guitarra
Simen Borven – Bajo
Baard Kolstad – Batería
Estaban llamados a gobernar la escena progresiva a nivel mundial. Su triada de discos “Billateral” (2011), “Coal” (2013) y “The congregation” (2015), intachable a todos los niveles, confirmaba que los noruegos Leprous habían venido para quedarse y así convertirse en la gran sensación del género en la década pasada. Lo tenían todo: personalidad, técnica, emoción, canciones, imagen, un directo arrasador… Su ascensión era imparable y cada paso que daban lo hacían de manera firme y exitosa.
Estaban acariciando la cima, sin embargo, con su siguiente álbum, “Malina” (2017), la banda empezó a mostrar signos de agotamiento en la fórmula. Su continuación, “Pitfalls”, con un cambio de sonido en el que el quinteto intentaba reinventarse abrazando su lado más melódico y minimalista, no ayudó a aclarar las dudas generadas por el lanzamiento anterior. En 2021 “Aphelion” tampoco terminó de mostrarnos a la banda que nos maravilló tan solo unos años atrás al tratarse de un disco que adolecía de ser poco cohesivo y falto de garra… ¿Qué había pasado? ¿Se había agotado la fuente de la inspiración? ¿Demasiada música en demasiado poco tiempo?
Con este panorama y una pandemia por medio, había ciertos recelos o dudas acerca de si Leprous volvería a ser de nuevo ese combo que nos enamoró en su día, y “Melodies of atonement”, su nuevo álbum, es el disco en el que el quinteto se ve obligado a aclarar las dudas.
“Melodies of Atonement”
Desde el propio título y probablemente de forma involuntaria, estas “melodías de expiación” sirven en cierto modo como redención de cara a los seguidores que perdieron la fe en el grupo algún momento de los últimos años. La banda se reencuentra en este nuevo disco con su cara más dura y metálica, recuperando parcialmente la complejidad técnica y la carga emocional que les caracterizó en sus discos más celebrados, pero sin renunciar a la evolución que se espera de una banda como ellos. Siguen estando presentes los sintetizadores de los últimos lanzamientos, la filosofía cercana por momentos al pop más experimental o las inevitables melodías vocales que ya son sello distintivo de la banda, pero da la sensación de que todo fluye de manera mas natural y de que las canciones son más consistentes y homogéneas de lo que lo fueron en los últimos tiempos. Definitivamente es un paso firme en la dirección correcta.
Como siempre, la banda suena de lujo a nivel instrumental, con mención necesaria para la interpretación vocal de Einar Solberg y los juegos rítmicos de Baard Kolstad. Aunque hayan recuperado de algún modo su vena más dura, es cierto que el álbum es menos enrevesado y progresivo que “Billateral” por ejemplo, como también lo es que la banda ha sabido sintetizar su propuesta e ideas para componer un grupo de canciones pulidas, coherentes y, en definitiva, francamente buenas.
Los dos adelantos del disco (y los primeros cortes de éste) son una declaración de intenciones: “Silently walking alone” y “Atonement” nos muestran a un grupo que no renuncia a su juego de ambientes, a su complejidad rítmica, a sus reconocibles melodías, a sus sintetizadores y a su propuesta emocional, pero con unas guitarras bastante más gruesas y duras que en los últimos lanzamientos del combo. “My specter” sigue en la misma onda para dejar claro como suenan los Leprous de 2024 y formar un trío inicial difícilmente mejorable. Es cierto que de alguna manera abusan de “crecendos” en varios temas, pero no cabe duda de que saben hacerlo con maestría y les funciona a la perfección. “Like a sunken ship” o “Limbo” juegan con elementos de trip-hop y del pop más arriesgado, a la vez que experimentan con atmósferas tremendamente opresivas. La intensidad de “I hear the sirens” o la final “Unfree my soul”, muestras del buen estado de forma compositivo e interpretativo de la banda, ponen el nivel de épica del disco en cotas muy altas.
Conclusión
Leprous retoma la senda correcta con este “Melodies of Atonement”. Con una mayor carga metálica que los últimos discos, pero respetando la sensibilidad melódica y electrónica que han sido santo y seña en dichos lanzamientos, y en especial formando el que probablemente es el disco más compacto y redondo del grupo desde 2015.
Han sabido tomar los elementos más característicos de todas sus épocas y condensarlos en un disco versátil y maduro que reafirma su posición de dominio en la escena progresiva mundial y deja claro que los noruegos todavía tienen mucho que ofrecer.
Texto: Jose Mora
Temas:
1.Silently Walking Alone
2.Atonement
3.My Specter
4.I Hear The Sirens
5.Like A Sunken Ship
6.Limbo
7.Faceless
8.Starlight
9.Self-Satisfied Lullaby
10.Unfree My Soul