Spencer Elden demanda a Nirvana por pornografía infantil y todo ello después de 30 años del lanzamiento de «Nevermind».
Los miembros de Nirvana, varias discográficas, Courtney Love y los herederos de Kurt Cobain han sido demandados por Spencer Elden. Spencer fue la persona que apareció cuando era un bebé de cuatro meses en la icónica portada del disco «Nevermind» de la banda.
El demandante alega que la imagen del bebé nadando tras un dólar en una piscina violó los estatutos federales de pornografía infantil y la explotación sexual de niños. En la demanda Elden afirma que su «identidad y nombre legal están ligados para siempre a la explotación sexual comercial que sufrió cuando era menor de edad y que se ha distribuido y vendido en todo el mundo desde que era un bebé hasta la actualidad».
Según la demanda: «conscientemente produjeron, poseyeron y anunciaron la pornografía infantil comercial en la que aparecía Spencer, y recibieron un emolumento a cambio de hacerlo. A pesar de este conocimiento, los demandados no tomaron medidas razonables para proteger a Spencer e impedir su explotación sexual generalizada y el tráfico de imágenes».
Elden afirma que sus padres nunca firmaron una autorización para el uso de las fotos, que fueron tomadas en un centro acuático de Pasadena en 1990. Alega que la banda prometió cubrir sus genitales con una pegatina, que nunca se incorporó al arte del disco.
«Para asegurarse de que la portada del álbum desencadenara una respuesta sexual visceral por parte del espectador, Weddle activó el ‘reflejo nauseoso’ [provocar arcadas] de Spencer antes de lanzarlo bajo el agua en poses que resaltaban y enfatizaban los genitales expuestos de Spencer», sostiene la demanda.
La demanda alega además que los acusados «utilizaron la pornografía infantil que representaba a Spencer como elemento esencial de un plan de promoción de discos utilizado habitualmente en la industria musical para llamar la atención, en el que las portadas de los discos presentaban a los niños de forma sexualmente provocativa para ganar notoriedad, impulsar las ventas, y obtener la atención de los medios de comunicación y las críticas».
Además, Spencer pide una indemnización de 150.000 dólares a cada uno de los 17 acusados (poco más de dos millones de doláres), los honorarios de los abogados y un juicio con jurado.
Spencer sostiene también en la demanda lo siguiente: «El daño permanente que ha sufrido incluye, pero no se limita a la angustia emocional extrema y permanente con manifestaciones físicas, la interferencia con su desarrollo normal y progreso educativo, la pérdida de por vida de la capacidad de generar ingresos, la pérdida de los salarios pasados y futuros, los gastos pasados y futuros para el tratamiento médico y psicológico, la pérdida de disfrute de la vida, y otras pérdidas que se describirán y probarán en el juicio de este asunto»,
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