Discográfica:
Record Breaking Records
Fecha de edición:
2 de febrero de 2024
Componentes:
Dan Cleary – Voz
Timothy Brown – Guitarras
John Simon Fallon – Guitarras
Pete Klassen – Bajo
Jonathan Webster – Batería
Valoración:
Striker, más allá de sus horteras atuendos para las fotos promocionales, siempre han experimentado y sabido explotar la influencia tan vasta que los años ochenta han infligido en ellos. Aquellos fueron los años en los que esa identidad abarcaba un amplio espectro de sonoridades que, bien podían cobijarse bajo un mismo paraguas, y no alterar en demasía el sentimiento de ser “el más Heavy” del lugar, al menos de cara a la galería.
Desde sus inicios, los canadienses han cabalgado a lomos del Speed, el Thrash menos beligerante y un Power Metal menos escandaloso y fantástico que el trasnochado, a día de hoy, homónimo europeo. Con más pretensiones que el noventa por ciento de sus coetáneos, con su anterior álbum, Play To Win, se bajaron ligeramente las gafas de sol con el dedo corazón y vieron un horizonte mucho más embriagador, más rentable, en la enorme jungla mestiza que devora el alma de los nostálgicos de la época dorada. Algo que solo ellos podían conseguir dadas sus habilidades técnicas, sobre todo con ese toque “shred”, con sentido y consentido, bendiciendo a una dupla de guitarras afiladas con diamante.
Ultrapower, su nuevo álbum, la ambición desatada
Mantienen el pulso de sus primeras andaduras, compactos como pocos, en una simbiosis de Metal lindante con el Thrash (“Circle Of Evil” con efecto Muse incluido, “Brawl At The Pub” o “Blood Magic” que no para de recordarme a los primeros Helloween cachondeo “Western” mediante) o incluso con un “Groove” más actual como en la certera “Turn The Lights Out”.
Pero el verdadero desprecio por las etiquetas y su mayor logro, vaya por delante, es conseguir coherencia y continuidad entre las diferentes manifestaciones que invocan en su tablero de Güija particular.
Su objetivo es retener y poseer a nuestro perfil melómano más despreocupado y, aquí, no hay exorcismo posible. ¿Cómo lo consiguen? Primero con su contagiosa y transgresora expresión musical pletórica de habilidades.
Después, hilando con un invisible cordel desatado en la versátil y apasionada voz de Dan Cleary, melodías indelebles y unos coros barriobajeros, tumultuosos que lo mismo se suman al Heavy/Rock macarra en “Sucks To Suck” o “Ready For Anything”, como al Hard Rock de maquillaje férreo de “Best Of The Best Of The Best”, “Thunderdome” (solo neoclásico a la “Malmsteen” incluido), o se entremezclan y vuelven a ecualizarse con un acercamiento al sonido “Leppard” en las vacilonas adaptaciones “New Retro Wave” de “City Calling”, “Live To Fight Another Day” o el A.O.R. más sofisticado y veraniego de “Give It All” (el saxo que introducen es “delicatessen”).
Conclusión:
Si el futuro de nuestra música está en el pasado, Striker han conseguido crear un puente de baldosas de neón que, no solo te trasladan a “Oz(zy)”, sino que hacen que Toto ruja como Pantera, que una desmelenada Dorothy encuerada brinque con las “Air Jordan” en un “pogo” de satén o que el hombre de hojalata se venda a peso de acero. Aquí la única bruja mala del oeste serán tus prejuicios.
Temas:
1.Circle of Evil
2.BEST of the BEST of the BEST
3.Give it All
4.Blood Magic
5.Sucks to Suck
6.Ready for Anything
7.City Calling
8.Turn the Lights Out
9.Thunderdome
10.Live to Fight Another Day
11.Brawl at the Pub