Discográfica:
Atco Records
Fecha de edición:
29 de agosto de 1985
Componentes:
Bert Heerink: Voz
Adrian Vandenberg: Guitarra, Teclados, Coros
Dick Kemper: Bajo, Coros
Jos Zoomer: Batería, Coros
“Alibi”: La útima gran coartada de Adrian Vandenberg
Pues no, no le fue mal del todo al grupo de Adrian Vandenberg en los albores de su carrera. Contrato discográfico con la todopoderosa Atlantic y un primer disco de homónimo nombre grabado en los estudios que poseía Jimmy Page.
Un pequeño clásico de hard rock de su época que introdujo su nombre en los Estados Unidos. Un superventas no fue, pero logró entrar en listas, un meritorio puesto sesenta y cinco en el Billboard, gracias al hit single “Burning Heart”, una sentida power ballad que a la postre sería el buque insignia del cuarteto. Una incursión en el mercado americano que culminó esta carrerilla inicial con sendas giras abriendo para KISS y Ozzy Osbourne. El terreno parecía abonado para ir escalando en popularidad progresivamente, pero su segundo álbum “Heading For a Storm” publicado en 1983 no respondió a las expectativas creadas.
Funcionó bien en su tierra natal; los Países Bajos, pero sin un single claro que tomara el relevo de “Burning Heart” se estancó en la parte baja de las listas americanas, concretamente en el número ciento sesenta y nueve. Ante este panorama se tenían que quemar todos los cartuchos, y en 1985 se publicó “Alibi”, que para quien suscribe estas líneas es su obra más lograda. Se mantiene el estilo hard rock clásico del grupo, pero con una lograda incidencia más acusada en las melodías, armonías vocales y teclados, logrando que quizás sea la colección de canciones más logradas bajo el nombre del quinteto. Cuantos grupos de AOR se dejarían cortar un brazo por componer baladones del calibre de “Once In a Lifetime” o “How Long”.
Por supuesto no todo iban a ser canciones tan sentidas, el disco rockea duro también, pero con mucho hincapié en los estribillos y melodías. “All The Way”, “Voodoo”, el tema título o “Fighting Against The World” enganchan desde el primer momento que se escuchan, sea sólo quizás la potente “Pedal To The Metal” la más reminiscente de tiempos anteriores. Y quien raya al mismo nivel que las logradas composiciones es el hombre que da nombre al combo: Adrian Vandenberg. Su aportación con las seis cuerdas es de un buen gusto extremo, virtuoso pero melódico, rozando a veces el neoclasicismo pero manteniendo la cordura, sin caer en el onanismo gratuito.
Escuchad la instrumental “Kamikaze” donde el guitarrista desarrolla su estilo, sin apabullar, con todo en su sitio y en su justa medida. Un álbum exquisito y de mucho nivel, pero que desafortunadamente no fue el revulsivo que necesitaba su carrera, de hecho fue el que peor funcionó de su discografía, ni asomó su cabeza en las listas americanas, algo un poco incomprensible, primero por su calidad y luego por ser 1985 una época en que el hard rock campaba a sus anchas en listas. Un estocada de muerte, que hizo que el vocalista Bert Heerink saltará del barco, que especialmente carismático no era (no nos vamos a engañar), pero poseía una garganta privilegiada, perfecta para las composiciones del grupo y que brillaba con la misma intensidad que la guitarra de Adrian Vandenberg.
Se intentó reflotar la nave con otro vocalista, pero Atlantic no estaba ya interesada en esos Vandenberg. Al poco tiempo los cantos de sirena (o de serpiente) que hacía tiempo que David Coverdale dirigía al guitarrista, fueron escuchados esta vez, y Adrian se enroló definitivamente en la aventura de los Whitesnake más americanos y peroxigenados. Veinticinco millones de copias vendidas de “1987” y una década de estrecha relación laboral con David Coverdale avalan la decisión tomada. Esto no es óbice para reconocer el trabajo de Adrian pre Whitesnake, un combo que destacó dentro del abigarrado panorama hard de la época y que tiene en “Alibi” su mejor cota artística.
Texto: Xavi Martínez
Temas:
1. All the Way
2. Pedal to the Metal
3. Once in a Lifetime
4. Voodoo
5. Dressed to Kill
6. Fighting Against the World
7. How Long
8. Prelude Mortale
9. Alibi
10. Kamikaze