Banda: Ángeles del Infierno
Lugar: Auditorio Nacional, México
Promotor: Music Live
Una nueva conquista española da inicio con la presencia de dos héroes que han decidido tomar el timón para emprender una historia épica, con una base sólida musicalmente hablando y con 46 años de trayectoria, son argumentos de peso que respaldan a estos ibéricos que sin temor emprendieron una aventura, y apostaron por representar dignamente a toda una historia de música metalera proveniente de España.
Nombres importantes de bandas como: Barón Rojo, Obús o Soziedad Alkoholica, nos vienen a la mente como un punto de partida del metal español.
Saber que Ángeles del Infierno darían una gira y que esta tendría como punto de encuentro el «Auditorio Nacional» causaba que la piel se nos erizara, ya que escasas son las bandas del género de Metal que tienen el atrevimiento y privilegio de tocar en este recinto.
Ángeles del Infierno desafiaba dicho atrevimiento para llegar al coso de reforma y plasmarse como un auténtico referente del metal.
Un largo recorrido por territorio azteca como parte de su gira, marcaba el inicio de este peregrinar, el compromiso fuerte estaba por llegar y la propia banda lo sabían, por lo que previo al concierto Juan Gallardo y Roberto manifestaban en plena rueda de prensa lo siguiente: » No es fácil estar en el Auditorio Nacional, sabemos de la importancia que ello implica, pero contamos con bases de sobra para demostrar el por qué hemos tomado este reto».
Al otro lado del silencio se encontraba la ciudad de Aztlán para recibir a los Ángeles del Infierno listos para emprender una conquista musical, las manecillas del reloj callaban y el viento avisaba que el momento había llegado y una lluvia corrosiva se aproxima en medio de tambores y pantanos oscuros, la noche nos absorbe para anunciar que las puertas del infierno están por abrirse, a las 20:41 de la noche aparecen con toda la maestría del mundo, estos tipos se apoderan del escenario y se muestran firmes y conocedores de donde están parados.
«Todos somos Ángeles» y “Sombras en la Oscuridad” es el punto de partida para una buena dosis de metal, fueron los temas que buscaron desesperadamente una salida de esa garganta de Juan Gallardo, para cincelar cada nota o estrofa en los oídos de todo ese público azteca que se hizo presente ante una buena entrada.
Juan Gallardo sin pensarlo, se plasma sólidamente y comienza su diálogo con el público azteca diciendo: “Hemos estado por cuatro meses de gira en este país, para nosotros también es nuestro México”, palabras que pronto envolvieron al público para iniciar lo que sería una increíble y brutal presentación.
El año de 1985 se hace presente con el trabajo Diabólica detonando de este cartucho “Prisionero” y “No pares”, orillándonos a pedir sin clemencia auxilio, ya que el recinto estaba incendiándose.
El público pronto entendió la temática del concierto y no dudo en responder ante la banda, coreando de principio a fin cada uno de los temas que se escurren por toda la noche.
Ángeles del infierno llegaba para este evento bien armado, los líderes indiscutibles Juan Gallardo en la voz y Robert Alvarez en la guitarra principal, se encargaban de distribuir el trabajo a sus músicos: Gustavo Santana (guitarra), Alfredo Colchado (guitarra), Alex Medina (bajo), Gerardo García (batería), músicos que con amplio conocimiento y responsabilidad ejecutaban con el alma cada interpretación.
La noche pagaba con creces la presentación de estos ibéricos, que en todo momento paró de sus butacas a la afición azteca de principio a fin, la banda se mostraba confortable y como lo habían manifestado anteriormente Juan y Roberto “somos una banda chilanga, tenemos una segunda nacionalidad”.
Podemos considerar que en este concierto la banda devolvió a la afición mexicana esa gran muestra de calidez humana, basta con ver cada parte de la producción del evento en donde los videos que se proyectaron mostraban episodios de la sociedad mexicana, caso típico el Chopo o lugares donde han visitado.
De 1986 llega el bello tema “Pensando en ti”, en donde Roberto muestra su maestría, retorciendo sus dedos y triturando cada partitura para que al final de la canción se llevará una oleada de aplausos por la bestial manera de devorar sin piedad su guitarra.
Los temas siguieron cayendo como una dosis que aniquilaba nuestros sentidos y nos dejaba exhaustos.
“Si tu no está aquí” y “Donde estabas tú” excavaban nuestras mentes como trituradores; ha llegado el momento, de que hablemos de una vez, de que esmeres tu lenguaje; si se trata del tema “Con las botas puestas” que marcaba la mitad de la faena, el objetivo estaba ya alcanzado.
Juan y Roberto anuncian a los asistentes la participación del músico Alejandro Lora (Del Tri de México) el cual acompañó a la banda con el tema “Dando por detrás”. Nada que reprochar y nada que pedir, además, Ángeles del Infierno sacaba la casta y manifestaba el porqué son una banda emblemática de la Nación española. Todo fue una lluvia de temas clásicos y las sorpresas no paraban, Juan ingresa con un grupo de mariachis para que en una versión muy al estilo metalero interprete el tema de José Alfredo Jiménez “El Rey”.
… Como parte de esas sorpresas, llega el tema “Hijos de América”, apoyándose de un grupo de danzantes prehispánicos.
Ángeles del Infierno nos regaló un set de treinta y un temas durante su actuación en el Auditorio Nacional, con más de dos horas de clásicos. Canciones como «A Cara Cruz» o «Al Otro Lado del Silencio» nos conquistaron, dejándonos sin palabras ante la apoteósica actuación de la banda.
