Banda: Crazy Lixx
Lugar: La piedad, Ciudad de México – 10 de marzo de 2024
Promotor: Beristain Entertainment
Fotos: Juan Gutiérrez
La noche se asomaba sigilosamente, todo estaba listo para ver arder en medio de ráfagas distorsionadas de metal la gran Ciudad azteca, la ceremonia inicia y no hay clemencia para hacer tregua, cinco guerreros se reúnen para dar inicio a esta invasión sueca, por vez primera y con una sola presentación por territorio Mexicano la banda “Crazy Lixx” se prepara desde lo alto de una pirámide para extraer del corazón de una guitarra cientos de notas musicales para hacerlas detonar frente la comunidad de esta ciudad.

La piedad, no tuvo piedad en recibir a estos músicos que como parte de su gira que lleva por nombre “Two Shots At Glory” llegaban por vez primera a territorio azteca, sin diálogo inicial el equipo de Crazy Lixx preparan el recorrido que estos tíos harán para subir al escenario, de manera descomunal se apoderan del mismo para iniciar con una buena dosis de metal con detonaciones peligrosas que van directamente a la yugular.
Con un sonido letal la banda logra inmediatamente conectar con su público para interpretar de inicio a fin cada uno de los temas, Danny Rexon logra inmediatamente esa interacción y conduce por territorios peligrosos al público azteca en donde el propio Danny sabe que en esa zona los atrapará con su estilo tan explosivo de cantar, el primer tema llega como un arpón, del álbum “Riot Avenue” de 2012 llega “Whiskey Tango Foxtrot”, inmediatamente las miradas y los oídos de todos los metaleros ahí reunidos fueron capturados, esa noche sería de alto riesgo por la gran cantidad de temas que esta banda traía en el bolsillo.
Del álbum «Ruff Justice», se desploma «Wild Child«, un tema que pronto envolvió al público asistente, Crazy lixx logra descifrar lo que los asistentes buscaban en ese momento; sólidos sobre el escenario Crazy Lixx impacta con su magia, sin dar un suspiro “Two shots at glory” del año de 1991 llegaba, indudablemente la interpretación se escuchaba fresca, en donde el público no paró de corear con Danny cada estrofa que conforma el tema para que el término del mismo cientos de puños sean lanzados al aire como una muestra de agradecimiento por la forma tan extrema de interpretar dicho tema.
“Son muy gritones”, “son una ciudad muy hermosa”…“Es la primera vez que estamos aquí” fueron parte de ese diálogo que se hizo durante la presentación de la banda y que su frontman expresaba a la audiencia.
El llanto de las guitarras de Chrisse olsson y Jens Lundgren se hacen presentes para anunciar la llegada del tema “Blame it on love” un tema del año 2010 que se encuentra contenido en el álbum «New Religion«, en donde la voz de Danny muestra una supremacía total.

Con el tema “21 ´Til Die” nuevamente el centro de espectáculos “La Piedad” cae en llamas, con esos coros de guitarras y coro de voces que solo hacen moverse de manera descomunal a todos, pese a que el escenario es pequeño, la banda supo distribuir perfectamente bien cada milímetro del mismo, los micrófonos estaban distribuidos perfectamente bien para que cada uno de los miembros de la banda a donde quiera que se movieran tuvieran esa chance de no perderse algunas estrofas de cada tema .
Llamó la atención ver salir a Danny con una máscara de Jason Voorhees al interpretar el tema XIII, para hacernos recordar aquella película que lleva por nombre Viernes 13, durante la interpretación Danny le pone el cuchillo en la garganta Chrisse Olsson.
Crazy Lixx nos regaló una noche mágica de buen metal, en esta primera visita por tierras aztecas la banda fue contundente, ¡no regalo nada!, ante una apabullante presentación olvidaba el público mexicano la tardanza para llegar a este territorio.
El público que se mostró en esta presentación se vio fiel y seguidor de la banda, el lugar se prestó bastante bien para poder recibir a estos tíos que expresaron su música de una manera fresca y natural, como si el tiempo no hubiera pasado por ellos.
Entre una capa oscura y espesa llena de gritos que cantan el «Ole, Ole, Ole Crazy , Crazy» llegaba el bis con el cual la banda no duda de nuevo en subir al escenario con el tema «Anthem for America», en donde Danny sube con una bandera de los Estados Unidos y comienza a ejecutar de manera descomunal con cientos de puños en alto dicho tema, moviéndose de extremo a extremo como un auténtico toro de lidia.
Los resultados se habían alcanzado, la primera visita salía con un saldo favorable en donde la banda no se achicó y brindó una presentación majestuosa, con un buen metal que en todo momento inyectó adrenalina de la más peligrosa en nuestras venas