Bandas: Tierra Santa
Lugar: Sala Salamandra(Hospitalet del Llobregat) – 19 de enero de 2024
Promotor: RRS Promo / Eclipse Group
Fotos: Alfredo Espada
Tierra Santa se han ganado un puesto de honor dentro del heavy metal nacional a base de trabajo y de ser fieles a sus influencias y estilo. El quinteto se presentaba en la Salamandra habiendo tocado recientemente en Burgos y en Madrid y con el bonito recuerdo que todavía guardamos quienes les vimos en el pasado Leyendas del Rock. No inventaron la pólvora y no pretendieron nunca hacerlo, pero el tiempo les ha ido dando la razón y la lluviosa noche hospitalense les recibió también con un sold out de facto. La sala estaba llena hasta la bandera, y en el escenario, el logo del grupo y las luces dejaban claro que presentaban disco en directo y DVD.
No suelen llevar teloneros y la culpa de ello es que rozan las dos horas de directo, algo que el fan agradece en sobremanera. El quinteto liderado por Ángel San Juan iba vestido de negro, destacando el gran papel de los teclados de Juanan San Martín y ese enorme aporte que le da Alex Alonso tras los parches a los temas. Inicio típico y definitorio de su sonido en “Pecado de ángel” y ya entrando de lleno en los clásicos infaltables con “Indomable”, cargada de unos teclados muy Rainbow en los arreglos. Sonaron mejor que en el Leyendas y gustaron esas luces amarillas en “Por el valle de las sombras”. Apenas hablaron al público presente, tampoco presentaron al grupo y dejaron en canciones como “Sangre de reyes” todo el protagonismo.
Esos espárragos de luz cambiaron al rojo en “Apocalipsis”, otro tema muy deudor de Dio mientras que el marcado riff de “Otelo” optaba por los focos verdes. El público no se quedó atrás ante el buen trabajo del combo navarro y apoyó en los coros el “Tierras de leyenda”, una de las más esperadas. La combinaron con la épica de “El dorado” y un ejercicio puramente maidenesco como es “Destino”. A estas alturas Alex ya se había descamisado. A nivel de sonido todo lució como debía y la voz de Ángel sigue sonando tan bien como hace 27 años. Siempre es un placer el poder ver al otro pilar del grupo Roberto Gonzalo al bajo, disfrutando y entregándose a la música y al directo.

“Drácula” es siempre de las más aplaudidas y otra que les define especialmente. Y es que miras el extenso set y todo son grandes hits de los que el fan disfruta gustosamente. “Juana de Arco” decantó la balanza hacia el disco Sangre de reyes, hasta cinco del mismo cayeron esa noche. Dan Díaz y Ángel San Juan estuvieron a un alto nivel y sólo recuerdo un momento en el que se desacompasaron e intercambiaron una mirada con sonrisa de complicidad. “Nerón” vino con la intro ampulosa de teclado de Juanan San Martín y disfrutamos de “La leyenda del holandés errante”, que siempre les funciona y ya es otro clásico más. “Pegaso” posee una de las entradas más míticas del grupo, tan imprescindible como “El laberinto del minotauro”. Impresiona ver a la sala cantando toda la letra.
Los bises empezaron por la maideniana “Alas de fuego”, poseedora de uno de los mejores estribillos que nunca han compuesto. Volvimos a la “sangre azul de 2001” con “La sombra de la bestia”, otra de las que uno siempre espera junto a “Legendario”, himno absoluto de coreo masivo. Y como viene siendo habitual desde que musicaron el célebre poema de Espronceda, “La canción del pirata (I & II)” cerró una noche en la que quedamos más que convencidos y en la que vimos a unos Tierra Santa en uno de los mejores momentos de toda su carrera. Si han grabado un directo hace poco, es por algo. Eché en falta “Rumbo a las estrellas” o “Séptima estrella”, pero está bien así, que tras casi dos horas de directo te sigan faltando hits… dice mucho de un grupo.